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Cientos de sureños de Gran Canaria han enfilado este fin de semana con energía renovada en El tablero para reencontrarse con una de las tradiciones locales más emotivas, tras dos años de parón obligado a causa de la pandemia del coronavirus y mirando a un cielo pidiendo agua a las medianías y trabajo en el sector del turismo.

La vuelta de las fiestas ha sacado a la gente a la calle y vecinos y visitantes abarrotaron todas las actuaciones en diferentes puntos del barrio con presencia de grupos de música y rondallas vecinales con el respaldo de empresas del barrio y del Ayuntamiento. Los tirajaneros se han reencontrado con emoción con la cita que pone de manifiesto la hermandad de un pueblo y la celebración tradicional de mayo.