El consejero delegado de Lopesan, Francisco López, dio esta semana un volantazo al lanzar operaciones de la cadena como gestora en el mercado asiático, un mercado que en las islas tiene como referente en esa zona a SBH Hotels (Palm Oasis y Grupo Pérez Cabrera de Fuerteventura), que desde hace unos años tiene complejos por valor de 94 millones de euros. En esa área Lopesan no se mete en el negocio del ladrillo sino de la gestión.
Francisco López, en su interés de exponer lo menos posible a Lopesan a la inseguridad jurídica de operar en suelos como Canarias, donde hay restricciones a la creación de hoteles de cuatro estrellas, ha optado por hoteles de corte familiar pero de cinco estrellas en Asia. López dijo este miércoles que la empresa "mantiene su ambicioso plan de crecimiento, con el objetivo de duplicar, en cinco años, la oferta alojativa internacional que gestiona".
Eso quiere decir que optará por explotar hoteles de otros siempre que le cuadre los números a la empresa. Todo esto viene por "el proyecto de transformación" de Lopesan en ser "una gestora de primer nivel internacional y la comercialización de propiedades de terceros". El Eden Beach Resort & Spa pasará a ser un Lopesan Collection Hotel y ocupa más de 30.000 metros cuadrados. Son 208 alojamientos con suites de hasta 30 metros cuadrados y villas con piscina privada.
La decisión de Lopesan coincide con la de las autoridades de inmigración de China dijeron la semana pasada que limitarán estrictamente los viajes de salida "no esenciales" y adoptarán un enfoque riguroso para la emisión de documentos de viaje. Los ciudadanos chinos deberán tener razones "esenciales" como estudio, operaciones comerciales o necesidades médicas para obtener los documentos necesarios. Es decir: dejará de existir el turismo chino.
Aunque China ha tenido una estricta política de viajes al exterior y estrictas cuarentenas de entrada durante la pandemia, el anuncio de la semana pasada se produce cuando el país ha visto un aumento en el interés por la emigración en medio del caos de los cierres de este año. El énfasis ha generado preocupaciones sobre si los viajes al extranjero ahora serán aún más difíciles. Muchos usuarios de Internet chinos ya se quejan de que se les ha negado un pasaporte incluso con una razón válida para viajar, lo que crea un mercado negro donde los agentes falsifican documentos adicionales para reforzar las solicitudes de pasaporte, según el sitio web chino Sixth Tone. Solo se emitieron 335.000 pasaportes en la primera mitad de 2021, o alrededor del 2% del número emitido en el mismo período de 2019.
