El partido que hasta ahora ha controlado la Concejalía de Urbanismo en Tirajana ha decidido mantener silencio sobre la crisis abierta por el PSOE de Las Palmas a cuento de la cementera de El Pajar. "El partido tiene en estos momentos un serio problema jurídico, lo sentimos por los vecinos de El Pajar, y es que no sabemos si en 2023 tendremos discurso sobre este asunto, es mejor esperar a que baje Carmelo Ramírez y diga algo", afirmó este fin de semana una fuente de NC. Los cuatro diputados de NC en el Parlamento de Canarias respaldarían en teoría el discurso del PSOE pero ya mantienen posiciones encontradas con sus socios en diversas materias como transportes y financiación de la islas vía REF.
Así, la desaparecida Nueva Canarias, que ingresa fondos públicos por formar parte de una coalición llamada Frente Amplio, ha optado por dejar el asunto en manos de los socialistas y establecer un cordón sanitario sobre el asunto: la posición es no tener posición. El PSOE de Las Palmas ejecutó una maniobra de distracción sobre las operaciones de la familia Masaveu en el sur de Gran Canaria en contra de las posiciones locales del PSOE de Concepción Narváez. Los socios nacionalistas del PSOE no han salido en rescate de la formación cuando controla la ordenación del territorio en el sur de Gran Canaria.
En la coalición de gobierno local tampoco se manifiesta la concejal de Ciudadanos, que está ajena al proceso al ser titular de Turismo y Hacienda, y una de CC que está en fase de expulsión. Posiciones claras sobre la cementera de El Pajar Coalición Canaria y Unidos por Gran Canaria. El PP de Las Palmas dice una cosa pero su marca local apuesta por mantener la ubicación en este espacio.
Este agosto el consejero Franquis valoró que la evaluación socioeconómica que se ha realizado en estos meses sobre el futuro de este puerto, identificando los costes y beneficios sociales de todas las opciones posibles, "indica que la opción con mayor beneficio social es la del uso mixto", dijo. Sin embargo, y aunque en una primera fase se pueda combinar ambos usos, "el objetivo que se persigue es llegar a un acuerdo con todas las partes para que en un plazo razonable se pueda trasladar tanto la concesión portuaria de uso industrial como la propia fábrica de cemento al lugar indicado para ello (el Puerto de Arinaga) cumpliendo así con la vocación del uso de ocio y turístico sostenible previsto en la planificación insular del Cabildo de Gran Canaria", dijo el PSOE desde el Gobierno de Canarias.