Entre el despacho del presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, y el palmeral de Maspalomas hay en línea recta 172 kilómetros aproximadamente, es decir, la misma distancia de olvido de un lugar de origen que recauda tanto IGIC como un supermercado de Playa del Inglés, que comparte toponimia con el sur de Gran Canaria. El partido que controla Gesplan y la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias no obtiene votos en el sur de Gran Canaria porque es como ATI pero en La Gomera. Maspalomas tiene en común con La Gomera únicamente que son espacios colombinos pero en el sur grancanario no vivió Beatriz de Bobadilla.
Todo ocurrió a partir de 2018. En La Gomera se lanzan controles contra los hippies que viven en la isla. De aquel marcaje salió uno y se instaló, al estilo primitivo hanseática usando cuerdas, y palmeras cortadas por ellos mismos y con muebles adquiridos en los distintos puntos limpios. Acotó una parcela con perros. De aquella época se ha pasado a 8 cabañas, donde malviven 2 italianos, 2 alemanes, 2 peninsulares y 2 árabes. Esto es solo en el Palmeral Oasis, pero entre Sonnenland, Faro 2, Playa del Inglés y Maspalomas hay más de 100 aussteiger castigando al destino y al empleo de los sureños.
Gesplan, la empresa que controla Agrupación Socialista Gomera (ASG), el partido del presidente insular Casimiro Curbelo, tiene el palmeral de Maspalomas lleno de hippies alemanes que emplean en sus chozas hasta energía fotovoltaica. Y esto al lado de hoteles que de cinco estrellas superior que venden noches a más de 900 euros en temporada alta. Los aussteiger es el término en alemán para definir a las personas que viven al margen del sistema llevando una forma de vida alternativa. La comuna aussteiger procedente en el Oasis de Maspalomas pasa desapercibida desde hace años para los medios de papel de Las Palmas, más preocupados en vender programas de TV a la Administración regional dejando que los sureños y la gente que visita el sur de Gran Canaria se encuentre que la zona aussteiger a la que Gesplan no le mete mano es una zona descontrolada y ajena a cualquier control de tipo legal.
Una fuente oficial indicó que el uso de aplicaciones tipo Tinder o Pasion.com de móviles para ligar está generando que las cabañas sean usadas para vender servicios sexuales aunque sin producir residuos. El personal de Gesplan tiene rango de autoridad y es la empresa autonómica que tiene la encomienda de gestión y control. Entre otras responsabilidades Gesplan debe poner en conocimiento de la Guardia Civil o Policía Canaria estos hechos. Los hoteleros de la zona están hartos de advertir del daño de imagen que las autoridades canarias están generando y que ya está en redes sociales de posicionamiento del destino como TripAdvisor o Booking.