La federación de empresarios hace suyo el compromiso por el fomento de prácticas ejemplares en el uso de las infraestructuras que garantizan la recogida y el tratamiento de residuos
Representantes de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT) de Las Palmas se reunieron hace días con directivos y responsables técnicos de la empresa Canaragua para abordar el estado de las redes de saneamiento de la zona turística de San Bartolomé de Tirajana, al objeto de incidir en sus problemas más relevantes y las posibles soluciones, en colaboración con el Ayuntamiento tirajanero.
En la reunión con Canaragua, como empresa concesionaria del servicio de abasto de agua, saneamiento, depuración y reutilización en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, participaron dos integrantes de la junta directiva de la FEHT: su vicepresidente, Tom Smulders, a su vez presidente de la Asociación de Empresarios de Alojamientos Turísticos (AEAT), y Fermín Sánchez, también presidente de la Asociación de Empresarios de Bares, Cafeterías, Restaurantes y Ocio de Las Palmas (AEBCRyO). Por la empresa Canaragua, participaron Jaime Planells, su director de zona en el sur de Gran Canaria, y la ingeniera Mónica Henríquez. Asistieron también Óscar Santana, técnico de servicios públicos del consistorio, y Matías González, experto en sostenibilidad del Instituto de Turismo y Desarrollo Económico Sostenible (Tides) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
La reunión, a solicitud de la FEHT, abordó algunos acontecimientos recientes sobre el estado de la red de saneamiento en la zona turística de San Bartolomé de Tirajana, que han obligado a realizar trabajos por la empresa concesionaria. Algunos de estos, al ser realizados en horario nocturno por las dificultades que conllevan las reparaciones mientras se desarrollan actividades económicas en el entorno, han ocasionado ruidos y molestias en instalaciones hoteleras de la zona turística, cuestiones que, sugirió la FEHT, hay que evitar cuando sea posible.
El responsable de Canaragua en la zona sur de Gran Canaria destacó que buena parte de los problemas de la red de saneamiento viene como consecuencia de una errónea utilización de la misma, y subrayó que el mayor perjuicio a las canalizaciones subterráneas y las instalaciones de depuración es provocado por productos sólidos, sobre todo las toallitas higiénicas, que son ya un problema de reciclaje a escala internacional.
También produce desperfectos en las infraestructuras el vertido de aceites a la red y no a los contenedores previstos para ello, que aparte de evitar los vertidos abren la puerta a su reutilización como biodiesel. Jaime Planells subrayó que estas dos prácticas son las principales responsables de la obstrucción de las redes de saneamiento en la zona y explicó, en una visita posterior sobre el terreno, los métodos que utiliza la empresa concesionaria para detectar y reparar dichas averías.
Por parte de la FEHT, Tom Smulders reiteró el compromiso de los empresarios del turismo, tanto hoteleros como extrahoteleros, por la sostenibilidad como un concepto que hay que llevar al terreno práctico, “asumiendo responsabilidades claras, como hemos hecho en la reciente firma del documento sobre turismo salido de la Cumbre de Glasgowsobre el clima, pero también con acciones concretas como el fomento de las conductas excelentes en el uso de las redes de saneamiento”. El empresario animó, en particular, “a señalar mejor en los envases de las toatillas los daños que pueden producir si son vertidas a la red de saneamiento”, e incidió en el firme compromiso de los empresarios del turismo en la adopción de todas las medidas de respeto a la sostenibilidad ambiental del municipio y las zonas turísticas de la isla. Citó a las pilas como otro elemento reciclable a considerar en serio.
Este compromiso fue reiterado Por Fermín Sánchez, en su condición de presidente de los empresarios de restauración, recordando que las prácticas modélicas deben ser adoptadas por todo el sector y recordando las medidas de eficiencia ambiental adoptadas por negocios de restauración en la isla de Gran Canaria, “sobre todo en el tratamiento de residuos y el fomento del reciclaje y la economía circular”, señaló.



 






