La situación económica actual obliga a una de las empresas más longevas del municipio a echar el cierre
Tras 44 años de historia en el municipio, la Panadería Maspalomas se ve obligada a echar el cierre. El motivo de este cierre responde a las deudas arrastradas desde la pandemia y el actual sobrecoste e inflación en las materias primas a causa del conflicto bélico en Ucrania. El paro en las exportaciones desde Ucrania ha supuesto un incremento en el precio del pan de un 13% desde el inicio de la guerra.
Desde la empresa aseguran que pudieron aguantar el duro golpe de la pandemia, pero que solo durante el primer año sufrieron pérdidas que ascendieron hasta los 700.000 euros. Sin embargo, en plena recuperación por la pandemia, la guerra en Ucrania tumbó definitivamente a la histórica empresa tirajanera.
La situación durante este último año ha sido crítica, provocando incluso que muchos accionistas llegaran incluso a poner en venta su patrimonio personal para poder destinar recursos económicos a la empresa. La plantilla de trabajadores de la empresa asciende a 65 empleados que durante los duros años que ha atravesado la empresa se han visto afectados por impagos y que tras esta decisión se ven en la calle sin ni siquiera haber recibido una carta de despido, simplemente un aviso para no acudir a su puesto de trabajo el 22 de mayo.
La nave de la empresa se encuentra hipotecada en 800.000 euros, por lo que a pesar de vender todo el material y la maquinaria, valorada aproximadamente en tres millones de euros, no podrían abordar los pagos a los trabajadores.