Una de las situaciones más peligrosas a las que nos podemos enfrentar en casa es al fuego. El desconocimiento sobre qué hacer en esas situaciones puede acarrear graves consecuencias personales.

En esta semana, dos incendios domésticos en el sur de Gran Canaria han causado tres heridos, uno de ellos hospitalizado por quemaduras e inhalación de humo. Hace un mes, también en el sur de la isla, un hombre de 86 años falleció en un incendio ocurrido en su domicilio, en las inmediaciones del Campo Internacional.

La prevención es clave para evitar los incendios en el hogar. Para reducir el riesgo, una de las medidas más efectivas sería la instalación de alarmas, detectores de humo u otros elementos contraincendios que permitan detectar y actuar con rapidez ante cualquier indicio de fuego en el domicilio.

Además, se debe tener cuidado en la cocina, ya que la mayoría de los incendios domésticos comienzan allí. Nunca se debe dejar la cocina desatendida mientras se cocina, y es importante apagar los electrodomésticos después de su uso. También se debe tener precaución con el aceite caliente y mantener los objetos inflamables lejos de las llamas.

El mantenimiento adecuado de las instalaciones eléctricas es otra medida importante. Los cables eléctricos deteriorados o sobrecargados son una causa común de incendios. Por lo que es necesario revisar y reparar cualquier cable defectuoso y evitar el uso de enchufes múltiples para prevenir sobrecargas eléctricas que puedan soltar chispazos y ocasionar el inicio de un incendio.

También es esencial almacenar adecuadamente las sustancias inflamables. Productos como solventes, pinturas y aerosoles deben guardarse en lugares frescos y secos, lejos del alcance de los niños y alejados de fuentes de calor o llamas abiertas.