El atractivo del archipiélago canario no pasa desapercibido ni para turistas ni para inversores. El último inversor que ha puesto la mirada en las islas es nada más y nada menos que Warren Buffett, una de las figuras más relevantes en el ámbito empresarial y bursátil a nivel mundial.

Warren Buffet es uno de los máximos exponentes del famoso “sueño americano”, pasando de repartir periódicos para ganar algo de dinero a invertir en ellos posteriormente, consiguiendo amasar una fortuna que ha llegado a superar los 116.500 millones de dólares. Buffett es también un conocido filántropo, llegando a donar hasta 4.000 millones de dólares a la Fundación Gates el pasado año. Sin embargo, a pesar de su fortuna y de poseer 400 millones de acciones de Coca Cola (entre otras muchas empresas a través de su sociedad Berkshire Hathaway) tiene una vida de bajo perfil, no es asiduo a eventos de alto lujo y sigue viviendo en la casa que compró en Omaha, su ciudad natal, en 1958.

A través de su inmobiliaria, Buffett se ha propuesto aumentar su presencia en territorio español. Recientemente ha abierto una nueva sucursal en Málaga, sumándose así a las otras cinco oficinas que tiene Berkshire Hathaway HomeServices en el país. Desde la inmobiliaria han dejado claro que las zonas costeras de España interesan mucho a la hora de invertir, dejando entrever también un claro interés por los archipiélagos españoles y sus oportunidades.

Este interés del magnate estadounidense por invertir en el archipiélago y las nuevas rutas aéreas directas que han comenzado a establecerse entre las islas y Estados Unidos pueden dibujar un nuevo escenario turístico en Canarias en el cual el mercado turístico estadounidense crezca exponencialmente.