El regreso del septiembre económico en el sur de Gran Canaria coincide con el inicio de compras de hoteles por parte de los fondos capital riesgo, esa bendición llegada de la mano de entidades como la socimi de Bankinter (dueña del antiguo Tamarindos y un Labranda en Mogán), Blackstone (mayor operador hotelero del sur grancanario con los IFA, Dunas o Barceló Margaritas), abre un nuevo capítulo con la irrupción de Azora, que este 2023 ha comprado a Lopesan sus hoteles IFA de Alemania y activos inmobiliarios que dan al Báltico.
La llegada de los fondos ha generado que los herederos de empresas familiares que han fracasado en el negocio turístico al calor de la burbuja inmobiliaria de la pasada década ha supuesto la entrada de efectivo, reformas y gestión altamente controlada. Eso sí, la presencia en circuitos patronales se las dejan a gestores para que se entretengan en algo y no metan las narices en las compras de los recintos. Los periodos de estancias de los fondos que comenzaron a llegar al sur grancanario tienen todavía un horizonte de desarrollo y, obviamente, antes de vender reforman los activos.
Azora tiene dinero para comprar hoteles o participaciones que conlleven posibilidades de ampliaciones de capital para controlar los ingresos. Así, ha lanzado un nuevo vehículo 270 millones de euros y una capacidad inversora de 500 millones de euros. Lo que se pueda comprar en el sur de la isla será con un horizonte inversor de 5 a 10 años. El fondo ha sido claro: "nace con el objetivo de invertir en el sector inmobiliario del sur de Europa de manera flexible y aprovechar las distintas oportunidades que se están generando, tanto en segmentos tradicionales como desarrollo de suelo, otras clases de activos emergentes, como son el desarrollo residencial para alquiler, centros de datos, agricultura, ocio, retail, modelos de vivienda alternativos".
Para desarrollar esta estrategia, Azora cuenta con un equipo de 11 profesionales que aportan una amplia experiencia a la hora de identificar oportunidades y transformar activos para su reposicionamiento, adaptándolos a las necesidades de un mercado cada vez más dinámico y exigente que demanda activos de alta calidad gestionados con los más altos niveles de profesionalidad y aportándoles gran valor añadido. En el lanzamiento de este nuevo vehículo, Azora cuenta con el apoyo de uno de los principales fondos soberanos que ha depositado su confianza en la larga trayectoria de Azora como experta a la hora de saber identificar oportunidades diferentes, gestionar complejidad, añadir valor a través de la gestión y generar retornos superiores.
Para Cristina García-Peri, socia directora de Estrategia y Desarrollo Corporativo, ha comentado: “En un entorno como el actual, de mayor volatilidad e incertidumbre, los grandes inversores institucionales apuestan por gestores expertos que tienen un profundo conocimiento del sector inmobiliario y un acceso diferencial a oportunidades de inversión". Para Javier Rodríguez Heredia, socio director del Área Inmobiliaria de Azora, "las nuevas tendencias en la manera de vivir, trabajar, y divertirse van a requerir una gran transformación en la manera que se utilizan y se diseñan los activos".
Azora está especializada en la inversión en todo el abanico del sector inmobiliario y en diferentes clases de activos: residencial, hotelero, logístico, oficinas, centros de datos, residencias de estudiantes y de tercera edad, energías renovables y está impulsando nuevas líneas de inversión en ocio, infraestructuras y sostenibilidad. La gestora aprovechará su larga y exitosa trayectoria inversora en todos esos los segmentos del mercado para asegurar el éxito de este nuevo proyecto de inversión.
Panorámica de Playa del Inglés,(Parque Europeo) 









