Hay que ser temerario para ser consejero de Transportes del Cabildo de Gran Canaria y no tener whatsapp creyéndose que es el primer ministro de Zimbabwe. Así funciona el vicepresidente insular Miguel Ángel Pérez del Pino, al que es imposible que un dirigente hotelero le mande un mensaje de vídeo con el riesgo de aglomeraciones de turistas en la puerta de entrada de Gran Canaria por vía aérea. Pérez (al que Antonio Morales tiene, 'logiamente', la matrícula cogida desde mayo de 2019) se fue de whatsapp huyendo de mensajes del PSOE cuando las cosas funcionan mal como el pasado fin de semana. Y tiene por costumbre no atiende por teléfono a nadie, tampoco en su línea privada. El sector turístico gastando un fortunón en Londres en la feria World Travel Market diciendo que el destino está preparado y el área de gobierno de transportes del Cabildo de Gran Canaria dejando inoperativo a toda una industria por ausencia de taxis y plazas suficientes en la antigua Salcai. El escaparate más importante de la aviación comercial de Canarias ha sufrido una imagen devastadora este sábado a la que se suma los riesgos de contagio de Covid-19.