Las autoridades religiosas de Canarias mantienen la teoría de una potencial escala del Papa Francisco en Gran Canaria, donde se ubica la sede del Ejército del Aire y del Espacio en las islas, camino o de regreso de Argentina en 2024. Esa escala serviría para visitar el sur de Gran Canaria y, en concreto, celebrar un encuentro ecuménico en Maspalomas al hilo de la inmigración que hay en las islas con múltiples nacionalidades. Esto depende de las dificultades de movilidad que presenta y la edad de 87 años que tendrá el año próximo.
La visitas del Papa se prevén con dos años de antelación y ya en verano de 2023 el alcalde Marco Aurelio Pérez hizo una invitación oficial en persona para que se alojara a descansar en Gran Canaria. Pérez no quiere que se vea una visita fugaz del Santo Padre a Maspalomas como una herramienta de promoción turística pero sí quiere que el sur de Gran Canaria sea sede de la Jornada Mundial de la Juventud de verano de 2028. La que hubo en Lisboa atrajo a más de medio millón de peregrinos. La Jornada Mundial de la Juventud de 2027 se celebrará en otras islas, las de Filipinas. Tiempo para preparar todo esto hay y asocia al destino a familias y jóvenes. ¿Hay espacio para celebrar un evento de esta magnitud? Sí. No es un congreso de fisioterapeutas en Expomeloneras, es otro concepto. Se alojan en tiendas de campaña y casas de gente que acoge. El viaje a Argentina en 2024 dependerá de la diplomacia vaticana y las relaciones con el nuevo gobierno de Javier Milei.
Pero el poder ejecutivo canario tiene otros planes. El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, en la visita que realizará al Vaticano el próximo mes de enero invitará al Papa Francisco a viajar al archipiélago, ya que entre los asuntos que le trasladará está la emergencia humanitaria de la crisis migratoria que sufren las islas, a donde han llegado en lo que va de 2023 más de 35.400 migrantes, de ellos más de 4.500 menores migrantes no acompañados. Fuentes conocedoras del entorno religioso canario ven un disparate que el Papa Francisco vaya a la isla de El Hierro cuando en Gran Canaria por seguridad y logística tiene los mismos problemas. Si va a Las Palmas el espacio elegido sería de jurisdicción militar mientras que en Maspalomas sería religioso al existir el recién reformado Templo Ecuménico de Maspalomas.
El pontífice está previsto que reciba al presidente canario en una audiencia privada el próximo 15 de enero en el Vaticano, a la que también asistirán los tres obispos de Canarias, Bernardo Álvarez, José Mazuelos y Cristóbal Déniz. El Papa Francisco envió el pasado 20 de noviembre una carta a los obispos de Canarias en la que les expresaba su "aliento y cercanía" ante la "difícil situación" que está atravesando el archipiélago debido a la crisis migratoria, al tiempo que les agradecía sus "grandes esfuerzos" para dar respuesta a la situación de emergencia.
