“El problema ahora es a ver dónde se meten, ya aquí han creado bastantes problemas teniendo este edificio. Ahora a ver…” comenta una vecina de la calle Goya, junto al edificio que Guardia Civil y Policía Local desalojó ayer miércoles por un incendio en su interior.

Las labores de desalojo se alargaron durante toda la mañana y buena parte de la tarde por la poca colaboración de los okupas que provocó momentos de tensión en la zona. Multitud de personas presenciaron atónitos el dispositivo policial, con más de una decena de vehículos de Guardia Civil y Policía Local, lo que obligó a cortar parte de la calle Tenerife y causó retenciones en uno de los principales puntos de acceso y salida de Santa Lucía de Tirajana.

“Eso lo ves desde que pasas, ahí dentro hay basura, colchones con restos fecales, ratas (...) eso es lo que ves desde fuera, dentro no me quiero imaginar”, afirma un trabajador de la zona, el cual también afirma que han habido varios altercados con vecinos y transeúntes de la zona; “a mí no me ha tocado, pero muchos vecinos se han quejado de escupitajos, comentarios, insultos y hasta agresiones, sobre todo a altas horas de la noche”, añadió

De hecho, en 2022 un okupa se encaramó a la fachada del edificio huyendo de la policía para evitar su detención. Un suceso que fue recogido por varios medios y televisiones nacionales.

Tras el desalojo de este miércoles, la Policía Local se vio obligada a mantener cortada parte de la calle Tenerife durante la noche para evitar que los desalojados volviesen a okupar el edificio. Un dispositivo de vigilancia que, previsiblemente, se mantendrá hasta que se tapien y bloqueen todos los accesos al edificio, unas labores para las que previamente habría que sanear el interior del inmueble.

Sin embargo, pese a la presencia policial y el hecho de haber acabado con un dolor de cabeza para vecinos y comerciantes de la zona, la inquietud y el temor no cesa. “La cosa ahora es dónde se meten (...) son 50-60 personas las que habían viviendo dentro y que ahora no van a tener ese ‘echadero’, algún otro sitio en la zona van a buscar. Eso es así” comentaba sobre esta situación un vecino de la zona que presenció el desalojo y las reyertas que se provocaron entre okupas y agentes.

De momento no se conoce la fecha en la que se realizarán las labores de sanitización necesarias y de bloqueo a los distintos accesos al inmueble.