El vicepresidente de la FEHT, Tom Smulders, dijo este fin de semana que no tiene lógica todo lo que se ha organizado porque carece de salidas al sector
Se supone que el Gran Canaria-Maspalomas Marathon es para promocionar el turismo, pero, de momento, lo que genera es crispación entre los que se benefician de esa promoción. Los hoteleros rompieron este fin de semana la unanimidad en el apoyo a esta prueba porque quien ha diseñado las vías de entrada de guaguas y coches de turistas, empleados y proveedores han generado un problema logístico industrial. El AVPP ha pedido datos sobre el plan de tráfico y ha sumado un matiz en su prioridad en lo que interpreta como defensa del interés general: quiere saber quién ha sido contratado y por qué para organizar esta competición.
El vicepresidente de la FEHT, Tom Smulders, dijo este fin de semana que no tiene lógica todo lo que se ha organizado porque carece de salidas al sector. Esto provoca colas para los desplazamientos de llegadas y salida de turistas en un momento en el que, además, el propio Gobierno de Canarias ha vuelto a imponer controles de seguridad por la pandemia del Covid19. Los hoteleros advierten que esto provoca, en el caso de las salidas, que la gente que viene a Gran Canaria de vacaciones tenga que salir de sus establecimientos con mucho más tiempo de antelación. "¿Qué recuerdo estamos generando entre nuestros turistas?", se preguntó este sábado Smulders. A modo de ejemplo hay lanzaderas desde las 07.30 con un máximo de las 11.30 o 12.00 en Meloneras. A partir de las 07.30 horas se inicia el calvario.
El Gobierno de Canarias se plantea introducir "medidas adicionales" de control covid a los turistas extranjeros que viajen al archipiélago si se detecta un incremento de los casos importados, algo sobre lo que, por el momento, "no hay pruebas contundentes". El viceconsejero de la Presidencia, Antonio Olivera, ha indicado que le preocupa la posibilidad de que "el mal comportamiento" epidemiológico en los países emisores, fundamentalmente Reino Unido y Alemania, acabe repercutiendo en el archipiélago.
Por eso, el ejecutivo canario estará "muy pendiente" de la evolución de los contagios y de un posible aumento de los casos importados para ver si resultan necesarias medidas de control más allá de las existentes.




















