La gran financiación de empresarios a las campañas depende de las expectativas de victoria, obviamente. Una alianza de Ciudadanos y PSOE en San Bartolomé de Tirajana ayudaría más a los segundos que a los primeros. Mientras en Las Palmas capital parte de la dirección de Cs se ha pasado a CC y Nueva Canarias, es lo que ha pasado en el Cabildo de Gran Canaria, la entrada en el grupo de gobierno local del partido naranja puede servir para acabar con el liderazgo de AV, que decidirá en 2022 si concurre a las elecciones con el PP. De momento, AV ha frenado sus ataques a Cs tras la ausencia municipal en la World Travel Market de Londres en previsión a proponerle un acuerdo electoral para las elecciones de 2023.

Las alianzas están abiertas precisamente por la bisagra que es AV para el PP. El PSOE no iniciará negociaciones formales con Cs, que controla Turismo, hasta que AV formalmente despeje su futuro con el PP. En las elecciones de 2019 Cs tuvo, en plena ola de crecimiento de los naranjas, la no despreciable cifra de 988 votos. AV obtuvo 4.771 votos, PSOE un total de 4.323, la antigua ICAN logró 2.915 y CC, 2.195 votos. En San Bartolomé de Tirajana otra de las claves será la movilización del voto dado que en 2019 hubo 17.911 ciudadanos que fueron a votar, el 55,99 % mientras que las abstenciones fueron de 14.076 efectivos. Es decir, el 44,01% de la población no fue a votar. En ese contexto los casi 1.000 votos de Ciudadanos son un plato de buen gusto para negociaciones naranjas entre AV y PSOE canario. Cs cumple en San Bartolomé de Tirajana apenas 3 años con la espada de Damocles sobre su futuro. Comenzó su carrera en Gran Canaria paso a paso llegó hasta la arena nacional con un empuje arrollador para luego caer estrepitosamente, romperse por dentro y acabar casi en la irrelevancia.

En 2019 el PSOE optó por permitir su entrada en el grupo de gobierno buscando un comodísimo gobierno con algunas de sus "líneas naranjas" tras una derrota ante AV. Ahora Cs tiene que lograr encontrar el camino para relanzar el partido en el sur de Gran Canaria y además tiene que lidiar con los ataques directos de AV-PP para acabar de rematarlos. En 2016  aterrizó Cs en el sur grancanaroo se convirtió en una fuerza política de origen socialdemócrata, redefinido después de centro, liberal, progresista y sin apóstrofe, que concurrió por primera vez a unas elecciones locales de 2019. Se fue consolidando y entró en el sur de Gran Canaria pero solo logró algo más del 5% por ciento de los sufragios. Pero por ahora no hay señales de que haya encontrado la fórmula para que Ciudadanos pueda sobrevivir. La fuga de cargos y militantes espoleados en gran medida por el PP. "Resistir es vencer", dicen algunos dirigentes.