Corría 1999 siendo María Eugenia Márquez consejera de Política Territorial del Gobierno de Canarias cuando firmó el plan de defensa de las Dunas de Maspalomas. Han pasado 25 años y los vecinos del sur de la isla las protegen pero turistas desaprensivos y gente que viene de Las Palmas al sur las estropean. También se ha convertido en una zona de cancaneo y apenas hay recursos humanos para vigilar este espacio en el que se han hinchado empresas de Las Palmas a vender informes de consultoría y programas especiales que no han servido sino para justificar el humo.
Los primeros pasos para proteger este entorno fue en 1975 cuando los propietarios contactaron con el Cabildo de Gran Canaria para establecer los medios a través de los cuales se pueda declarar a la zona de dunas como Parque Natural. En 1980 se presenta en el Congreso de los Diputados una proposición de Ley para la declaración como Parque Natural a las Dunas de Maspalomas, proposición no aceptada por defectos de forma. En 1981 se elabora, por parte de la XI Inspección Regional del ICONA un proyecto para la declaración de la zona de las Dunas de Maspalomas como Paraje Natural de Interés Nacional, ocupando éste una superficie de 328 hectáreas.
En 1982, en el Boletín Oficial del Estado en un día del mes de julio se publica el Real Decreto por el cual se establecía una protección provisional de las Dunas de Maspalomas en el que se dispone la creación de una Junta o Patronato cuya finalidad es proponer y estudiar las medidas necesarias para salvaguardar y conservar este paraje.
En julio de 1983, el Patronato de Protección Provisional de las Dunas de Maspalomas dispone como medida de protección la elaboración de una propuesta de Proyecto de Ley para la declaración de Paraje Natural de Interés Nacional al conjunto de ecosistemas formado por el campo de dunas, charca y oasis de Maspalomas, adentrándose 200 metros en el mar como medida de protección a la base natural de arena y posibles vertidos en la zona, así como a la flora y fauna marina. Dicha propuesta se basaba en el informe que una comisión de técnicos elaboró a petición de dicho Patronato en marzo del mismo año, para la ampliación de los límites provisionales del espacio natural Dunas de Maspalomas. 418 hectáreas son las protegidas. La Ley 12/1994 de Espacios Naturales de Canarias dio al Paraje Natural de las Dunas de Maspalomas el carácter de Reserva Natural Especial.

































