La puesta en marcha de mecanismos que inhiban el maltrato a las Dunas de Maspalomas es uno de los debates que se están produciendo en la esfera jurídica de Canarias aunque el sur de la isla de Gran Canaria ya podría ser consultado porque, al final, es donde se ubica este parque natural. Curiosamente podría ser cualquier cosa menos las consultas relacionadas con impuestos. ¿Poner una ecotasa en las Dunas de Maspalomas puede ser sometido a consulta popular? Si se sabe enfocar la pregunta; pero no. ¿Prohibirìa usted el tránsito por las Dunas de Maspalomas hasta 2060 para observar su evolución científica? Podría ser una pregunta. ¿Cree necesario cobrar una tasa que sirva para echar abajo todas las estructuras de cemento que han invadido las Dunas de Maspalomas en los últimos 50 años?
Y es que desde 1985 está previsto legalmente que "de conformidad con la legislación del Estado y de la Comunidad Autónoma" los alcaldes, previo acuerdo por mayoría absoluta del pleno" y autorización del Gobierno de la Nación, podrán someter a consulta popular aquellos asuntos de la competencia propia municipal y de carácter local que sean de especial relevancia para los intereses de los vecinos, con excepción de los relativos a la Hacienda local según el artículo 71 de la Ley 7/1985, de 2 de abril, reguladora de las bases de régimen local.
Si el alcalde de San Bartolomé de Tirajana, Marco Aurelio Pérez, y sus socios del pacto del gobierno local de Coalición Canaria quisieran podrían someter a consulta tipos de intervención sobre las Dunas de Maspalomas sin la injerencias exógenas. La autorización de Madrid es obligada porque así lo prevén para las consultas populares que celebren los ayuntamientos tanto la disposición adicional de la Ley Orgánica 2/1980, de 18 de enero, sobre regulación de las distintas modalidades de referéndum, cuando se refiere a "la competencia exclusiva del Estado para su autorización".
A juicio de Eloísa Anguisola Santana, graduada en Turismo por la ULPGC este 2024, proponer una ecotasa que aporte una solución que reduzca la sobrecongestión de las dunas hasta una cifra óptima, acorde con su capacidad de carga estimada. sería útil. A su juicio, una pequeña tasa monetaria podría reducir la afluencia diaria, favoreciendo que solo aquellos que valoran este Espacio Natural Protegido lo visiten. Además, la recaudación derivada de esta medida se destinaría exclusivamente a labores de conservación, haciendo de esta solución una propuesta viable y sostenible para el futuro de las Dunas de Maspalomas.
