Ceisa, empresa de capital no canario del grupo Masaveu, dedicada a la fabricación de cemento, morteros, hormigón y prefabricados, con sede en el sur de Gran Canaria, ha ejecutado un primer proceso de transformación digital donde la seguridad y salud laboral ha sido el eje central del cambio, por lo que se han enfocado en alcanzar la excelencia en esta materia gracias a la tecnología. Para ello la empresa Velorcios ha desarrollado un plan donde la salud laboral ha sido el eje central del cambio en común acuerdo con la Patronal de la Construcción de Las Palmas.
La industria del cemento, particularmente consumidora de energía y emisora de gases de efecto invernadero, está sujeta a severas restricciones legales y ambientales. En efecto, su rendimiento energético resulta un desafío fundamental. Sin embargo, el proceso de producción del cemento es complejo y la necesidad de combustibles y electricidad dependen de múltiples factores: calidad del cemento fabricado, proceso de fabricación del cemento utilizado, parámetros de las líneas de cocción, almacenamiento de los materiales, rendimiento de los filtros, elección de combustibles fósiles o alternativos, composición química del crudo. Son muchos los elementos que dificultan su optimización energética.
Esta transformación de la industria cementera viene impulsada por el procesamiento de datos en masa, la capacidad de conexión en tiempo real, la producción personalizada bajo demanda y un referencial de fábricas inteligentes. Este proceso apunta a optimizar el uso de las materias primas y de la energía, al tiempo que a mejorar los flujos de información con una mayor eficiencia para generar soluciones para la construcción que respondan a las demandas de la sociedad del siglo XXI, con altas prestaciones y con un mayor valor añadido de prestaciones técnicas y contribución ambiental.
