El velatorio de Juan Franco tendrá lugar en la residencia ‘Hermanitas de los Ancianos Desamparados’, en Tafira. Este miércoles, 4 de diciembre, a las 15.30 horas, sus restos serán trasladados al cementerio de Santa María de Guía. El funeral en su memoria se celebrará el martes 10 de diciembre a las 19.30 horas en la Parroquia de San Fernando de Maspalomas
San Bartolomé de Tirajana despide con tristeza a Juan Franco López, conocido como Juan “el Retratista”, quien falleció a los 88 años. El fotógrafo que capturó la transformación del municipio a lo largo de más de cinco décadas. Su legado, compuesto por más de 5.000 imágenes, narra la evolución de la localidad desde sus raíces agrícolas hasta convertirse en uno de los destinos turísticos más importantes de Europa.
Durante los años 60, cuando San Bartolomé de Tirajana comenzó a abrirse al turismo europeo, Juan Franco fue el único fotógrafo del municipio. Desde entonces, su cámara fue testigo de los cambios más significativos: desde la construcción de los primeros hoteles como el Oasis o el Protucasa Maspalomas hasta la llegada del minitren y el auge del turismo en Playa del Inglés.
Nacido en una zona agrícola de San Bartolomé de Tirajana, Franco inició su camino como fotógrafo ambulante con una cámara de 6 x 6 y fogonazos de magnesio. Autodidacta e inquieto, estudió fotografía por correspondencia mientras trabajaba como agricultor. Su pasión lo llevó a documentar romerías, bautizos, bodas y actividades del municipio, inmortalizando tanto a los vecinos como a los primeros turistas que llegaban a disfrutar del sol y las playas de Gran Canaria.
Juan Franco también dejó huella en los medios de comunicación. Sus fotografías llenaron las páginas de publicaciones como El Eco de Canarias, Canarias7 y La Provincia, inmortalizando eventos históricos, visitas reales y momentos inolvidables del municipio.
Su archivo fotográfico es un tesoro documental que permite revivir la historia de un pueblo que pasó de ser agrícola a un epicentro turístico mundial. Las imágenes de “el Retratista” son testimonio vivo de la pesca en la charca de Maspalomas, los cultivos de tomate, la construcción de grandes hoteles y la llegada de los turistas que transformaron para siempre la economía y la identidad de San Bartolomé de Tirajana.
Hoy, Juan Franco deja un legado invaluable que forma parte del patrimonio cultural de Gran Canaria. Su cámara, siempre fiel compañera, nos permitió mirar al pasado y conservar en imágenes la esencia de un pueblo que no olvida su historia.
Su memoria vivirá en cada fotografía que dejó como testimonio de una vida dedicada a capturar la transformación y el alma de San Bartolomé de Tirajana.
D.E.P.