La patronal de Las Palmas se abstuvo en el consejo de Puertos Canarios a la hora de defender el interés industrial del negocio de la producción de cemento en la planta de la Corporación Masaveu en El Pajar, San Bartolomé de Tirajana. El grupo de presión de la que la cementera forma parte, Asinca, y la Asociación de Empresarios de la Construcción de Las Palmas (AEC) han criticado la decisión de eliminar el blindaje jurídico al recinto de la cementera para que el muelle que allí se ubica pueda dedicarse al turismo. Sin embargo, no han dicho nada para cuestionar el papel de la patronal de Las Palmas, la CCE. La AEC ha instado a las partes, Gobierno y Corporación Masaveu, a llegar a un acuerdo.

La Asociación Industrial de Canarias ha señalado que "esta decisión pone en peligro el futuro de una industria estratégica para las islas de la que dependen más de 600 familias". No entra en valoraciones sobre el papel de sus representantes empresariales y añade que "desde nuestra asociación, queremos trasladar nuestro total apoyo a CEISA una empresa referente del tejido industrial canario, que ofrece puestos de trabajo estables y de alta calidad, contribuyendo a mejorar y aumentar los niveles económicos y de bienestar social de nuestras islas y por ello, la consideramos estratégica y fundamental en una comunidad con significativas tasas de pobreza y desempleo".

La Asociación de Empresarios, Constructores y Promotores de la provincia de Las Palmas (AECP) ha mostrado su preocupación ante el "posible cierre" de la cementera de CEISA por su repercusión en lo que podría ser el "desabastecimiento y encarecimiento del cemento, retrasos en las obras y la desaparición de la escasa" presencia industrial del sector en Canarias. Empresarios de la construcción muestran su preocupación ante el "posible cierre" de CEISA en Gran Canaria. Para la AECP "dada esta situación, que podría dificultar la ejecución de obras de infraestructuras o viviendas, y que podría repercutir en un probable encarecimiento de esta materia prima, la patronal hace pública su esperanza de que Ceisa y Gobierno regional «lleguen finalmente a un acuerdo satisfactorio para todas las partes implicadas, incluido el sector de la construcción".