La alianza entre Onalia Bueno y Teodoro Sosa refleja un movimiento estratégico en la política insular de Gran Canaria. Onalia Bueno, alcaldesa de Mogán, y Teodoro Sosa, figura influyente en Gáldar y vicepresidente del Cabildo, comparten un interés en consolidar poder político a través de colaboraciones que podrían modificar significativamente. ¿Tiene votos Onalia Bueno para arrastrar a CC a manejar poder en la isla? Sí, y respaldo empresarial. Sobre el mes de mayo de 2025 se hará formalmente el anuncio que no tiene nada que ver formalmente con CC sino que será un partido que se asocie en CC bajo diversas fórmulas.
El contexto de esta unión se enmarca en la fragmentación del nacionalismo canario, particularmente con Nueva Canarias enfrentando divisiones internas. Bueno y Sosa han sido mencionados como posibles nexos en la formación de nuevas plataformas políticas que incluyen figuras locales de peso, algo que Coalición Canaria también observa como una oportunidad para ampliar su influencia en Gran Canaria. La suma de sus apoyos locales podría rivalizar con las estructuras tradicionales de poder político en la región.
Esta colaboración subraya una tendencia hacia la integración de fuerzas locales con aspiraciones regionales, y pone de manifiesto el impacto que la política insular tiene en el equilibrio de poder dentro del Archipiélago. Si bien esta unión busca maximizar la representación y recursos para Gran Canaria, también genera interrogantes sobre su impacto en la gobernabilidad y el desarrollo de nuevas alianzas a nivel.
El futuro de Nueva Canarias (NC) en Gran Canaria está condicionado por varios factores políticos y sociales. El partido, generalmente identificado con el nacionalismo progresista, enfrenta desafíos como mantener su relevancia en un panorama político que actualmente está dominado por partidos conservadores y coaliciones que han reducido su influencia en instituciones clave.
Nueva Canarias busca consolidar su posición enfatizando el canarismo progresista, la descentralización y la defensa de los intereses locales frente a políticas que favorecen a las élites. Su estrategia incluye recuperar espacios municipales y autonómicos, así como reforzar su conexión con las necesidades sociales, especialmente en áreas como educación, sanidad y sostenibilidad económica. El liderazgo de figuras como Román Rodríguez continúa siendo un pilar para movilizar a sus bases y atraer nuevos apoyos en un entorno competitivo.
El reciente crecimiento del gobierno conservador en Canarias, acompañado por un aumento en los cargos públicos y la falta de cumplimiento de ciertas promesas electorales como la reducción del IGIC (Impuesto General Indirecto Canario), es una oportunidad para que Nueva Canarias se posicione como una alternativa ética y enfocada en los intereses comunitarios. La formación también enfatiza la importancia del municipalismo como motor político, una visión que les ha permitido mantener relevancia en algunos municipios.