El Gobierno de Canarias ha aprobado este lunes el proyecto de la Ley de Ordenación Sostenible del Uso Turístico de Viviendas, que será debatido próximamente en el Parlamento regional. Según explicó la consejera de Turismo y Empleo, Jéssica de León, esta normativa busca mejorar la calidad de vida de los residentes mediante una regulación que fomente la sostenibilidad y ordene el fenómeno del alquiler vacacional, que hasta ahora ha crecido sin control. El texto, avalado por el Consejo Consultivo de Canarias, establece que no podrán habilitarse nuevas viviendas vacacionales en zonas residenciales hasta que los ayuntamientos lo determinen en sus planeamientos urbanísticos, un proceso que podría extenderse hasta cinco años.
La futura ley incorpora medidas específicas para garantizar el acceso a la vivienda y proteger el mercado residencial. Entre ellas, destaca la prohibición de destinar viviendas de nueva construcción al alquiler vacacional durante los primeros diez años tras su edificación y la restricción de este uso en edificios completos situados en parcelas residenciales. Además, la normativa mantiene el régimen de declaración responsable, pero exige una mayor documentación técnica que asegure condiciones de seguridad, salubridad y accesibilidad. Propietarios que actualmente operen viviendas vacacionales de forma legal podrán continuar ejerciendo esta actividad, aunque con limitaciones en cuanto a su transmisibilidad.
Este proyecto de ley, el primero registrado por el Ejecutivo en esta legislatura, será tratado como un trámite de urgencia en el Parlamento, lo que permitirá acelerar su aprobación. Según De León, su desarrollo ha sido fruto de un diálogo exhaustivo con sectores implicados, como cabildos, ayuntamientos y asociaciones, logrando un texto que prioriza los derechos de los residentes y la sostenibilidad del turismo en el archipiélago. Su debate iniciará a finales de enero, marcando un hito en la gestión responsable del turismo en Canarias.
