Gran Canaria es la única isla de la provincia de Las Palmas que no cuenta con un resort dedicado en exclusiva para la práctica deportiva
Que el deporte se está convirtiendo en la gallina de los huevos de oro para el turismo en Gran Canaria no se le escapa a nadie; bueno, quizá solo a los empresarios del sector a los que no le llama la atención que la isla sea la única provincia con un resort deportivo en condiciones que cumple con las exigencias de los deportistas internacionales que no solo llegan a Gran Canaria con la idea de descansar.
En los últimos meses el archipiélago ha mutado de ser lugar de descanso para deportistas a ser lugar de preparación y en muchos casos de acoger la propia competición, ya se trate de pruebas ciclistas, torneos de baloncesto o el próximo mundial de 2030, del que Gran Canaria será sede.
Si buscamos resort deportivo en Gran Canaria, las dos primeras opciones que nos aparecen en los principales buscadores es el Seaside Sandy Beach y el Servatur Monte Feliz, dos alojamientos que si bien cuentan con instalaciones deportivas en sus instalaciones no son comparables al Club La Santa de Lanzarote o al Playitas Resort de Fuerteventura, que cuentan en sus instalaciones con campo de fútbol (con las medidas oficiales), pista de atletismo, diversas pistas de tenis o piscina olímpica.
Por cierto, la empresa Playitas está presente en Gran Canaria precisamente en Servatur Monte Feliz, alojamiento al que ha dotado de diversas infraestructuras deportivas como una cancha de fútbol de césped artificial, gimnasio, un box de crossfit y pista de pádel.
Además, en plena lucha con los colectivos antiturismo por el llamado “turismo de calidad”, el sector está dejando escapar a deportistas de élite que, aparte de dejar dinero en Gran Canaria en viajes organizados junto a equipos de decenas de personas (entrenadores, técnicos, fisios, dietistas…) son ídolos de masas que pueden funcionar como reclamo incluso mejor que esos influencers que están ahora tan de moda entre los departamentos de marketing de las cadenas hoteleras.
Sin ir más lejos, el piloto de Fórmula 1 de la escudería Mercedes (campeones del campeonato de constructores 8 veces en los últimos 11 años) es asiduo del Club La Santa en Lanzarote, donde además de entrenarse en las instalaciones para prepararse de cara a las exigentes temporadas de un piloto de la máxima categoría se le suele ver practicando ciclismo durante su estancia. Una estancia en el resort deportivo que también disfrutó Fernando Alonso durante su época como piloto en Ferrari. Si Canarias tiene la fama, ¿por qué Gran Canaria no tiene las facilidades?
El clima y la orografía del archipiélago son un reclamo no solo para aquellos deportistas que quieren descansar, sino para los que buscan ponerse al límite de cara a preparar competiciones deportivas punteras a nivel internacional, por lo que no ven en las opciones de alojamiento de lujo y tranquilidad absoluta del sur de Gran Canaria su opción ideal. Entre los deportistas la tónica habitual suele darse entre dos opciones diametralmente opuestas a la hora de buscar retos y situaciones “incómodas” para prepararse físicamente, el frío extremo y la exigencia física de deportes como el esquí o el calor y las cuestas para poner el cuerpo al límite durante la práctica de ciclismo o trail running.
Por poner dos ejemplos actuales, el reciente campeón del Open de Australia y número 1 del mundo, el tenista Jannik Sinner, se fue hasta Dubai para prepararse buscando las altas temperaturas y las condiciones exigentes que se iba a encontrar durante el torneo; mientras que Fernando Alonso y Carlos Sainz preparan la temporada de Fórmula 1 que comienza en poco más de un mes en Val Gardena y los alpes franceses practicando esquí.
¿Por qué no puede Gran Canaria convertirse en el destino de referencia para que los deportistas europeos no tengan que huir fuera del continente cuando busquen la combinación perfecta entre clima e instalaciones para la práctica deportiva?
Y ya no solo deportistas individuales, los famosos stages de pretemporada de los equipos de fútbol en Marbella son la tónica habitual en los inicios del calendario futbolístico a nivel europeo entre los principales clubes, entre ellos la UD Las Palmas.
¿Qué mejor imagen para la promoción del deporte como atractivo turístico que darle al equipo de tu tierra (que promociona en su camiseta la marca turística de la isla) unas instalaciones punteras en el motor turístico del archipiélago para que no tenga que ir a preparar parte de la pretemporada a la península? (y a un destino rival, para más inri)
Con estos datos, resulta casi inentendible que no haya un proyecto en marcha para dotar al sur de un alojamiento especializado que, como mínimo, pueda echar un pulso a los que encontramos en Lanzarote y Fuerteventura.
Quizá será demasiado tarde cuando alguna empresa extranjera quiera plantar un resort deportivo en Las Palmas de Gran Canaria de cara al Mundial 2030 y con vistas a explotar posteriormente ese alojamiento con las actividades deportivas que se celebren en el nuevo Estadio de Gran Canaria.