El Cabildo de Gran Canaria mejora la estabilidad de la carretera GC-550 con una innovadora técnica de anclaje en los muros de contención, garantizando la seguridad y evitando colapsos en la vía
Las obras de refuerzo de la carretera GC-550, que conecta Santa Lucía de Tirajana con Temisas, avanzan con una innovadora técnica de estabilización mediante anclajes de acero. La intervención, liderada por el Cabildo de Gran Canaria, incorpora 56 bulones de más de 11 metros que atraviesan la estructura para consolidar los muros de contención y evitar futuros hundimientos o grietas. Con un presupuesto de 800.486 euros, esta actuación garantiza la seguridad vial sin necesidad de demoliciones ni expropiaciones.
Los trabajos, enmarcados dentro de un plan de conservación de infraestructuras, están siendo ejecutados por la UTE Aceinsa Movilidad y Cimentaciones y Arrendamientos, con un plazo de finalización previsto para junio. La obra incluye la colocación de una capa de hormigón proyectado sobre los muros existentes, la instalación de los anclajes de acero y la mejora de la impermeabilización para evitar filtraciones que puedan debilitar la estructura.
Una vez completado el refuerzo estructural, se procederá a la rehabilitación total del firme de la carretera, lo que permitirá restablecer la circulación con total seguridad. 'Esta intervención es esencial para prevenir un posible colapso y garantizar la conexión entre Santa Lucía y Temisas', señaló el alcalde de Santa Lucía de Tirajana, Francisco García. Por su parte, el vicepresidente del Cabildo, Augusto Hidalgo, destacó que esta técnica minimiza el impacto ambiental y asegura la estabilidad de la vía durante décadas.