Martes, 21 de Octubre de 2025
Maspalomas24h
TURISMOSol, arena y rendimiento: la fiebre del alquiler vacacional sacude el sur de Gran Canaria
El viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias El viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias

Sol, arena y rendimiento: la fiebre del alquiler vacacional sacude el sur de Gran Canaria

Y. V. Maspalomas24h Lunes, 07 de Julio de 2025

El sol no se pone nunca en Playa del Inglés, y tampoco sobre la rentabilidad de sus apartamentos turísticos. Mientras el debate sobre la turistificación se intensifica en medio mundo, el sur de Gran Canaria sigue afianzándose como uno de los enclaves más rentables para el alquiler vacacional en Europa. Con una ocupación media que roza el 80% anual y precios por noche que pueden superar los 180 euros, la fórmula del buen tiempo eterno y la conectividad aérea con los principales aeropuertos europeos sigue siendo un negocio de oro para miles de propietarios.

 

En zonas como Puerto Rico, Mogán, Playa del Inglés o San Agustín, pequeñas viviendas de uno o dos dormitorios reformadas con gusto pueden generar ingresos brutos anuales superiores a los 35.000 euros, superando con holgura las rentas que ofrece el alquiler tradicional. Según datos de operadores locales y plataformas como AirDNA y Transparent, el retorno bruto en algunas zonas supera el 12% anual.

 

"Una propiedad bien gestionada en Playa de Mogán o Meloneras puede ofrecer más rentabilidad que un fondo indexado o un piso en Madrid", explica Luis Suárez, gestor profesional de alojamientos turísticos en el sur de la isla. “Y con la ventaja de poder disfrutarla personalmente en temporada baja”.

 

¿Dónde están las zonas más calientes?

 

El mapa de la rentabilidad turística en el sur grancanario presenta diferencias notables según el perfil del visitante, la antigüedad del complejo y el atractivo de la zona:

 

Playa del Inglés y Puerto Rico, con oferta masiva y un perfil de visitante fiel, siguen liderando en ocupación, entre el 75% y el 85%, con tarifas medias que oscilan entre 80 y 140 euros por noche.

 

Meloneras, zona premium con hoteles cinco estrellas y viviendas de alta gama, alcanza precios de hasta 200 euros por noche, aunque con algo menos de ocupación.

 

Playa de Mogán, conocida como “la pequeña Venecia”, ofrece un equilibrio envidiable: hasta un 90% de ocupación media anual y precios medios por encima de los 130 euros por noche.

 

Entre Airbnb y Booking, el algoritmo manda

 

En este ecosistema, la rentabilidad no depende solo de la ubicación. La diferencia entre ganar 2.000 o 3.000 euros al mes puede estar en la gestión inteligente de tarifas (pricing dinámico), la respuesta rápida a los huéspedes o la limpieza impecable. “Lo que más penaliza en Booking es una mala reseña. Y lo que más premia en Airbnb es un buen algoritmo de respuesta y fotos profesionales”, apunta Suárez.

 

La creciente profesionalización del sector ha desplazado al pequeño propietario tradicional. Cada vez más, se imponen empresas de gestión que sincronizan canales, ajustan tarifas por demanda, aplican revenue management y ofrecen limpieza en menos de seis horas.

 

Los números detrás del paraíso

 

Una vivienda de 1 dormitorio bien ubicada puede generar hasta 30.000 euros brutos al año, con costes de gestión y limpieza que rondan el 20-30% del ingreso. El coste de entrada —compra de la vivienda— sigue siendo relativamente competitivo: entre 120.000 y 250.000 euros, dependiendo de la zona y del estado del inmueble. De ahí que muchos inversores vean en el sur grancanario un destino seguro en tiempos de inflación e incertidumbre financiera.

 

"Si compras por 150.000 y facturas 25.000 limpios al año, estás hablando de una rentabilidad neta del 10-12%, lo que no consigues en ningún depósito bancario ni con un alquiler de larga duración", señala un agente inmobiliario de Maspalomas que prefiere no dar su nombre.

 

Pero no todo es sol y cócteles

 

El auge del alquiler vacacional ha encendido también alarmas entre residentes y responsables públicos. El Cabildo de Gran Canaria y varios ayuntamientos, entre ellos Mogán y San Bartolomé de Tirajana, han comenzado a estudiar nuevas normativas para regular la expansión del modelo VV (vivienda vacacional), que ya representa más del 25% del parque turístico extrahotelero en algunas zonas.

 

A ello se suman los retos estructurales: saturación de servicios, subida del precio de la vivienda y una presión creciente sobre los barrios residenciales.

 

Pero mientras las políticas públicas avanzan con lentitud, las maletas siguen llegando. Y con ellas, las reservas. En un lugar donde el sol brilla 320 días al año, y donde la temperatura rara vez baja de los 20 grados, el negocio del alojamiento vacacional no parece tener fecha de caducidad. Al menos, de momento.

Más contenido

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.