Mogán, con sus 20.938 habitantes, mantiene sus puntos fuertes en la gestión, según IGAE. El Ayuntamiento del sur grancanario lleva con disciplina nórdica el objetivo de estabilidad presupuestaria según los criterios SEC. También cumplió la Regla del Gasto. Mogán muestra una gestión operativa corriente y robusta. Sin embargo, un gran salto en las inversiones de capital y un fuerte aumento en los gastos financieros, que incluyen una importante gestión de pasivos, inclinaron la balanza hacia un déficit sustancial en 2023. Los números hablan de una apuesta por el desarrollo, pero también del coste que ello conlleva.
Al analizar los datos por habitante, Mogán presentó ingresos de 3.124 euros por habitante, siendo el máximo en su rango de municipios en España (entre 20.001 y 50.000 habitantes). Sin embargo, sus gastos también fueron los más altos, con 3.364 euros por habitante. Esto dejó un saldo negativo de -240 euros por habitante. La deuda viva por habitante fue de 765 euros. El ahorro bruto en operaciones corrientes fue positivo, con 11.106.105 euros, indicando una buena salud en el día a día. El ahorro neto se situó en 4.969.777 euros. La deuda viva ascendió a 16.025.184 euros. Los ingresos liquidados totales alcanzaron los 65.402.533 euros. Los gastos liquidados se elevaron a 70.427.990 euros.
En las operaciones corrientes, los ingresos sumaron 54.095.019 euros (82,7% del total de ingresos). De aquí, los impuestos directos aportaron 15.871.533 euros (24,3%), los impuestos indirectos 6.558.544 euros (10,0%), y las tasas y otros ingresos 14.580.192 euros (22,3%). Las transferencias corrientes fueron de 17.032.315 euros (26,0%). Por el lado de los gastos corrientes, sumaron 42.988.914 euros (61,0% del total de gastos). Los gastos de personal fueron de 17.895.315 euros (25,4%) y los gastos en bienes y servicios 23.455.095 euros (33,3%). Los gastos financieros corrientes fueron menores, 619.090 euros (0,9%). Sin embargo, el desequilibrio llegó por otras vías. Las operaciones de capital mostraron un ingreso de 11.171.786 euros (17,1%), pero un gasto mucho mayor de 21.167.023 euros (30,1%). Las inversiones reales fueron la clave aquí, con 21.127.713 euros (30,0% del gasto total).
Finalmente, las operaciones financieras también contribuyeron al déficit. Ingresaron solo 135.727 euros, mientras que los gastos financieros alcanzaron los 6.272.052 euros (8,9%). La mayor parte de esto, 6.136.328 euros (8,7%), correspondió a pasivos financieros. La evolución de 2021 a 2023 muestra un panorama cambiante. Los ingresos totales de Mogán cayeron un 4,03% de 2022 a 2023, situándose en 65.402.533 euros. Esta bajada se explica por un descenso drástico en los ingresos por operaciones financieras (-99,22%). Sin embargo, los ingresos corrientes crecieron un 13,14%, impulsados por las tasas y otros ingresos (+36,58%) y las transferencias corrientes (+10,96%). Los gastos totales aumentaron un significativo 32,01% de 2022 a 2023, llegando a 70.427.990 euros. Aunque los gastos corrientes disminuyeron ligeramente un 2,43%, las inversiones reales se dispararon un 143,64%, y los gastos en pasivos financieros se incrementaron un asombroso 1.423,03%.
