El Patronato de Turismo de Gran Canaria ha culminado un exhaustivo plan de mantenimiento y mejora de los miradores del sur de la isla. El resultado es un circuito de balcones panorámicos que, en este verano de 2025, se encuentran en un estado de revista impecable, listos para deslumbrar a quienes buscan la foto perfecta o, simplemente, un momento de contemplación.
La ruta comienza en el Mirador de la Degollada de las Yeguas. Desde aquí, la vista del Barranco de Fataga es una postal que quita el aliento. El equipo de mantenimiento ha reacondicionado el pavimento y reforzado las barandillas, garantizando la máxima seguridad. Los nuevos paneles informativos, con ilustraciones y datos sobre la flora y fauna local, enriquecen la experiencia, convirtiendo la parada en una lección de naturaleza a cielo abierto.
Avanzando hacia el interior, el Mirador de la Presa de las Niñas es un oasis de paz. Las aguas tranquilas del embalse, rodeadas por el verde intenso de la vegetación, ofrecen un contraste fascinante con las áridas montañas circundantes. Las zonas de descanso y pícnic, limpias y bien cuidadas, invitan a una pausa refrescante antes de continuar el viaje.
El clímax de esta ruta se encuentra en el Mirador del Balcón de la Aldea. Aunque geográficamente se sitúa en el límite entre el sur y el oeste, su vista es una de las más espectaculares de la isla. Las pasarelas han sido completamente revisadas y pintadas, y las barreras de protección se han inspeccionado para asegurar la solidez de este balcón sobre el océano. La visión de los imponentes acantilados cayendo al Atlántico es una imagen que se graba en la memoria de cada visitante.
Finalmente, para los amantes del cielo nocturno, el Mirador Astronómico de Temisas ofrece una experiencia única. La limpieza del entorno y la restauración de los puntos de observación astronómica aseguran que no haya mejor lugar para contemplar las estrellas en el sur de Gran Canaria. Va