Las actividades lúdicas y divulgativas organizadas por la Concejalía de Medio Ambiente se celebraron con carácter festivo y familiar en el Centro Cultural Pancho Guerra
El Centro Cultural Pancho Guerra, situado en el casco histórico de San Bartolomé de Tirajana, fue escenario este domingo de un destacado encuentro lúdico y cultural impulsado por la Concejalía de Medio Ambiente del ayuntamiento local. El objetivo principal fue fomentar los valores medioambientales y culturales asociados a la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria, declarada por la Unesco, reforzando así el compromiso con el patrimonio natural y social del municipio. La jornada, financiada por la Consejería de Presidencia del Cabildo y el Instituto Insular para la Gestión Integrada del Patrimonio Mundial y la Reserva, se desarrolló desde primera hora con ambiente festivo y familiar, atrayendo tanto a residentes como a turistas interesados en las tradiciones canarias.
Entre las actividades más relevantes destacó un mercado agrícola y artesanal donde se ofrecieron productos locales como quesos, vinos, aceitunas, repostería sin gluten, mermeladas artesanales y mieles autóctonas. Empresas como Queserías Amurga-La Cazuela, La Chalupa o Cafetales Maspalomas sorprendieron a los asistentes con sus propuestas de kilómetro cero. Además, hubo talleres tradicionales —como el amasijo de pan en el horno del Museo Casa de Los Yánez— y actividades infantiles que promovieron la cultura local entre los más pequeños. La implicación vecinal fue notable gracias al servicio gratuito de transporte facilitado por la concejalía dirigida por Araceli Armas Cruz.
El evento incluyó también una vertiente formativa con charlas divulgativas sobre la importancia ecológica y cultural de la Reserva grancanaria. Midori Ramírez expuso las peculiaridades naturales del territorio protegido e hizo hincapié en su valor educativo dentro del proyecto Ecoescuelas. Por su parte, Lorenzo Pérez, presidente de la Asociación de Criadores y Exportadores de Cochinilla de Canarias, abordó los retos actuales del cultivo tradicional ante plagas recientes e informó sobre los avances hacia una Denominación de Origen Protegida para este producto emblemático. El encuentro finalizó con un almuerzo popular en Tunte amenizado por música tradicional canaria.