Era marroquí, sin antecedentes, y entre sus cosas tenía un billete de 500 coronas noruegas. La Fiscalía de Las Palmas solicita la pena máxima de prisión para un hombre que arrojó cocaína de alta pureza al suelo durante un control policial en la calle Madrid del municipio turístico de Mogán. La Audiencia Provincial de Las Palmas acogerá en los próximos meses el juicio oral contra M.E.A.I., acusado de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas. El Ministerio Fiscal ha solicitado una pena de 4 años de prisión y la posterior expulsión del territorio nacional por un periodo de nueve años, una vez cumplidas las dos terceras partes de la condena.
Los hechos se remontan a la mañana del 12 de enero de 2025, cuando M.E.A.I. fue interceptado por agentes de la Policía Local de Mogán en un control preventivo de vehículos en la céntrica calle Madrid de Arguineguín. Según el escrito de acusación, el acusado, al detectar la presencia policial, realizó una "maniobra evasiva" con el Volkswagen Polo que conducía. Los agentes le dieron el alto y, en ese preciso instante, el hombre arrojó una bolsa blanca bajo el vehículo.
La bolsa recuperada por los agentes contenía sustancia rocosa blanca que, tras ser pesada y analizada, resultó ser 99,77 gramos de cocaína. El informe de análisis toxicológico reveló una elevada pureza: 84,85%. El valor de esta sustancia en el mercado negro asciende a 5.989,19 euros. Además de la droga, al acusado se le intervinieron varios fajos de billetes que totalizaban una cantidad significativa de efectivo en moneda nacional y extranjera, incluyendo: 2 billetes de 100 euros, 8 billetes de 50 euros, 38 billetes de 20 euros, 1 billete de 500 coronas noruegas.
La Fiscalía sostiene que tanto la droga como el dinero intervenido estaban destinados al tráfico, poseídos por el acusado con el objetivo de obtener un "ilícito beneficio" y "atentando así contra la salud individual y colectiva de terceros". El Ministerio Fiscal imputa a M.E.A.I. un delito contra la salud pública, tipificado en el Código Penal para sustancias que causan grave daño a la salud. Además de los 4 años de prisión y una multa de 17.967 euros, el fiscal ha solicitado, al amparo del artículo 89 del Código Penal, la expulsión del territorio nacional del acusado (de origen marroquí y sin antecedentes penales) una vez haya cumplido las dos terceras partes de la pena, con una prohibición de entrada a España de nueve años.
















