La empresa responsable de los centros busca nuevo director para uno de sus centros en el municipio
El SAMU mueve ficha en sus centros de San Bartolomé de Tirajana. La empresa responsable de los centros de acogidas de menores migrantes busca nuevo director para uno de sus centros en el municipio, en el que cuentan con tres centros de estas características: UATE Farabella, UATE Roque Nublo y ARB Roque Nublo II.
Este último, el ARB Roque Nublo II, es el centro ubicado en Fataga que recientemente ha sido centro de la polémica tras un altercado en el que una vecina resultó herida y que posteriormente provocó la indignación de los vecinos del pueblo, que reclamaron soluciones a la directora del centro.
En este caso, la empresa responsable de los centros de acogida busca un nuevo director para el UATE Farabella, ubicado en Maspalomas. El SAMU publicitó esta oferta en uno de los principales portales de búsqueda de empleo y en su propia web.
Entre algunas de las funciones y responsabilidades del puesto ofertado están la guarda de los menores acogidos, garantizar los derechos de los menores, colaborar con el Ministerio Fiscal en su función de vigilancia así como con los servicios que tengan atribuida la función de inspección de los recursos o el cumplimiento de las resoluciones administrativas del centro, entre otras.
El puesto es indefinido y el SAMU pide una experiencia de 2 años para aplicar al mismo. El rango salarial de la oferta va desde los 30.000 hasta los 35.000 euros brutos anuales.
Cabe destacar que en la reunión que mantuvo la Asociación de Vecinos de Fataga con representantes del centro de Fataga (ARB Roque Nublo II), la directora del mismo, Tamara Carballo, explicó el régimen interno que se aplica a los menores y algunas de sus funciones en el centro ante las preguntas y los reclamos de los vecinos.
Sobre todo se incidió en el conteo nocturno de menores, uno de los motivos de queja de los vecinos ya que aseguran que muchos de ellos deambulaban por el pueblo todas las noches, causando ruidos y altercados. Carballo aseguró que el responsable de ese conteo son los trabajadores encargados del turno de noche y que se podían cometer errores porque “son humanos”.